sábado, 4 de octubre de 2008

Savitri Devi


Savitri Devi

Savitri Devi nace en Lyon, Francia, el 30 de septiembre de 1905, en el seno de una familia griega. Su verdadero nombre es Maximiani Julia Portas. Desde muy joven se decanta por su excepcional capacidad para el estudio. Dominaba a la perfección ocho idiomas, incluido el hindi y el islandés. Doctorada en letras, también obtuvo varios diplomas en física, en química y en biología.

Era una mujer consciente de sus orígenes griegos. Admiraba a “aquella civilización forjada en el hierro y en la verdad que fue la antigua Grecia de los héroes”. Al igual que para otros intelectuales del irracionalismo, para ella el canto del cisne de esta época heroica había sido la Guerra de Troya. Tras esta confrontación, la cultura helena se sumergió definitivamente en una era oscura. Identificando la perversión de la filosofía racionalista y del judaísmo, Savitri Devi nunca aceptó el judeo-cristianismo. Era profundamente pagana, aria y europea, así como enamorada de los brillantes dioses solares del hinduismo.

En 1936 se establece definitivamente en India. Las autoridades británicas la identificaron como sospechosa y la mantienen bajo estrecha vigilancia, ya que conocían su simpatía por el nacionalsocialismo de Hitler. Tras el estallido de la Guerra Mundial, Devi se casa con Krishna Mukherjie, un brahmán indio que publicó una revista filo-nazi enmarcada en el nacionalismo hindú, la New Mercury, clausurada en 1937.

Devi criticaba la degeneración que padece Occidente. En su opinión, Occidente se había convertido en un mundo falso, vacío, hipócrita y caldo de cultivo de todo tipo de decadencia cultural y social. De este modo, entendía que Hitler y el nacionalsocialismo habían de conseguir restaurar el mundo heroico.

Para restaurar este mundo, Devi vio al nazismo como un reflejo de la revolución que en su día emprendiera Akhenatón. Es la recuperación del culto de Atón, el culto del Sol Negro, el Padre de los dioses, identificado con el sol.

El culto de Atum-Ra, para Devi, como para otros ocultistas filo-nazis, había sido falsificado por el judío (Moisés), quien sobre esta base egipcia formuló el monoteísmo judío.

Cuando la guerra profana fue ganada por los agentes de la contra-iniciación, Devi y otros destacados ocultistas permanecieron firmes en su convicción, comprendiendo que la guerra secreta no cesará nunca en tanto que el mundo siga existiendo. Devi, Schwaller de Lubicz o el ex embajador chileno Miguel Serrano, nunca han traicionado su lealtad con la causa nazi.

Tras 1945, Devi realizó un peregrinaje por Europa y la Alemania destruida, profesando su fe por los pueblos alemanes, llegando hasta el lugar más sacro de esta que fue una gran nación. Allá, en Externsteine, las Rocas del Sol, Devi pasó una noche: “Y en medio de la noche, percibió la Antigua Luz. Luchadora infatigable, guardó esa Luz toda su vida, hasta morir combatiendo por el Führer”. (...) “Poco antes de partir de esta tierra, me había hecho envío de un poema suyo manuscrito: “Never forget, never forgive...” (nunca olvidar, nunca perdonar). Sí, Savitri, querida camarada, ¡nunca!... Y nunca te olvidaremos a ti tampoco ni perdonaremos el daño que te hicieron”. ( “Adolf Hitler, el Último Avatara”, Miguel Serrano).



::::::::::::::F.P.N::::::::::::::
[[[Blood, Honour & Pride]]]